Fortín Olavarría


Evocación del Paraná (Rosario)

“Vecinos contando y cantando historias de un barrio que ya partió”

Duración: 60 min.

Tres momentos históricos de un mismo barrio que se transforma: desde los quinteros de los años`30 hasta la locura del consumismo, dejando atrás aquella fábrica textil donde miles de personas tenían su fuente de trabajo y producción. Hoy día sobre esos mismos terrenos funciona un shopping y es aquí donde los propios vecinos nos convertimos en actores y vamos recorriendo otros barrios contando “Historias de nuestro barrio”. El Barrio Sarmiento: un Barrio que ya que partió.


Los Okupas del Andén (La Plata)

“Postales barriales de Fulanos de tales”- paseo por Meridiano V

Duración: 45 min.

Un barrio en el límite de una ciudad. Cincuenta vecinos. Una invitación.

Salimos “a la deriva” por las calles de Meridiano V para tomar impresiones con cada uno de nuestros sentidos. A través del paseo conocemos el espacio, aprendemos a habitarlo, le atribuimos cualidades simbólicas- emocionales y al volcar nuestras ideas y pensamientos sobre el lugar, lo vamos llenando de significados, lo vamos haciendo nuestro.

Colaborar de forma activa en la construcción de nuestro entorno produce dos efectos, por un lado aumenta nuestro sentido de apropiación sobre los lugares que utilizamos, y por el otro, aumenta el grado de control que tenemos sobre nuestras vidas, eliminando la sensación de que todo nos es impuesto desde un sitio lejano.

Sin los relatos, los barrios quedan desiertos. Por las historias los barrios se vuelven habitables. Despertemos entonces a las historias que duermen en las calles, vayamos a recorrer estas postales del Meridiano V recogidas por los vecinos.


Matemurga (Villa Crespo)

Zumba la risa

Duración: 65 min.

Una noche, tal vez de carnaval, en una calle o en una esquina, un barrio entero va a ser fotografiado. Todos los vecinos quieren quedar inmortalizados en la mejor imagen jamás vista por esas latitudes, pero algo sucede: han olvidado la risa, aquella voz escandalosa y lenguaraz, aquel ronquido de insolencia, rabioso y procaz. Sin embargo, la risa zumba en alguna parte.


CONTINÚA